Nuestra filosofía.
Nuestra filosofía se centra en dar un doble uso al suelo de forma que la producción agrícola y de energía eléctrica, a través de instalaciones fotovoltaicas, puedan convivir en un mismo entorno bajo dos premisas fundamentales:
Aplicaciones.
La energía agrivoltaica tiene diferentes aplicaciones dependiendo del entorno y del uso que se quiera hacer de las instalaciones.
Los proyectos solares pueden coexistir ocupando el mismo terreno que las extensiones de cultivo de frutas, verduras, hortalizas y cereales. El suelo bajo proyectos solares se puede usar como terreno de pasto para el ganado.
Los paneles solares conviven con los cultivos en la misma superficie. La sombra que estos mismos producen puede beneficiar el desarrollo de las explotaciones agrícolas haciendo un cálculo exhaustivo del porcentaje de sombreo necesario para obtener los mayores beneficios.
Estos paneles se construyen sobre unos 5 metros sobre el suelo (dependiendo de la plantación que debajo coexista) lo que permite realizar labores con maquinaria pesada, de recolección y demás tratamientos necesarios para las plantas. Los avances en fotovoltaica permiten además usar estos paneles sobre invernaderos.
Es nuestro propósito, al disponer de energía eléctrica en el campo:
Esto conduce a una agricultura de precisión a través de: