La digitalización y la Economía Circular están entrelazadas, marcando el camino hacia un modelo económico más inteligente y sostenible. Empresas y gobiernos reconocen la importancia de utilizar la tecnología digital para acelerar esta transformación hacia la economía circular.
Imagina un mundo donde compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar sean la norma. Esto es lo que representa la Economía Circular, donde el ciclo de vida de los productos se extiende y se reduce la generación de residuos.
Además, en la economía circular, la digitalización juega un papel crucial en el ahorro de energía y la optimización de recursos, gracias a avances en la domótica, el transporte y la industria.
La Estrategia Española de Economía Circular (España Circular 2030) destaca ejemplos concretos, como la movilidad urbana sostenible, el sector agroalimentario y el turismo.
La creciente demanda de materias primas y la escasez de recursos son desafíos globales a los que se enfrenta la sociedad actual.
La digitalización se presenta como una solución, pero requiere colaboración público-privada. La OCDE subraya que esta unión es esencial para implementar tecnologías sostenibles a largo plazo. La digitalización nos permite avanzar hacia un futuro donde la economía y la sostenibilidad van de la mano.